En alfarería existe un material de origen antiguo que da como resultado objetos de gran belleza y valor. Nos referimos a la porcelana ¿Qué es la porcelana? ¿Qué le da vida a un material tan codiciado y versátil? ¿Cómo se fabrica esta histórica artesanía? ¡Descúbrelo aquí!
¿Qué es la porcelana? Origen e historia
La porcelana es un material de origen cerámico, es decir que se compone de arcilla u otros minerales. Estos elementos son moldeados y cocidos a altas temperaturas dando como resultado objetos de alto valor estético y práctico. Los usos de la porcelana son muchos gracias a su alta resistencia al calor, durabilidad, fácil desinfección y versatilidad.
Este material es originario de China, probablemente en el siglo VII d.C. en la época de la dinastía Tang. Marco Polo la popularizo y le dio nombre, “porcellana”, que en italiano significa conchas de mar. La porcelana fue muy valorada en occidente, por lo que intentaron descubrir su fórmula de fabricación. Esta permaneció en secreto durante siglos, hasta que un químico alemán, Johann Friedrich Böttger, desveló el misterio.
Gracias a este experto hoy sabemos cómo trabajar la porcelana, ya que China nunca reveló el secreto de su creación.
Por su elegancia y gran durabilidad la porcelana aún hoy en día es altamente apreciada en la vida cotidiana. Un ejemplo de su resistencia es la porcelana antigua, hablamos de piezas con cientos de años de fabricación. Son obras de arte que aun en la actualidad siguen siendo valiosas a pesar de su edad.
Composición, propiedades y características de la porcelana
Si deseas conocer como trabajar la porcelana primero debes estar al tanto de su composición. Por lo general nace de la combinación de estos tres materiales:
Caolín
Es una arcilla natural del tipo primaria y el mineral más importante dentro de la mezcla. Su presencia debe ser de entre el 50 y el 55 % en la mezcla de ingredientes. Su nombre proviene de Kao-Ling, montaña China donde fue descubierto para posterior uso como material cerámico. Le da a la porcelana resistencia a altas temperaturas y un color blanco característico.
Cuarzo
Es un mineral compuesto de sílice y se le conoce coloquialmente como arena. Es de los más abundantes del mundo, después del feldespato, y compone el 22,5% – 25% de la mezcla. Su presencia evita que la porcelana se deforme durante la cocción porque disminuye su plasticidad.
Feldespato
Es un conjunto de minerales cuya presencia en el planeta se estima es del 60%. En su estado natural es un compuesto constituyente de rocas y dentro de la porcelana tiene la misma función: como su punto de fusión es bajo en comparación con los otros componentes, se derrite fácilmente. Este proceso termina por unir el resto de los materiales. Su presencia en la mezcla debe ser del 22,5% al 25%.
Aparte de estos ingredientes también se usa cuarzo y feldespato molidos para la cubierta y óxidos metálicos para dar color.
Propiedades únicas
La porcelana a lo largo de los siglos ha sido valorada incluso tanto como el oro. Eso es gracias a sus propiedades que la diferencian de los demás materiales cerámicos, los cuales son:
- La translucidez. Este efecto es producto de la reacción química entre los elementos que la componen en el momento de la cocción.
- Su porosidad es casi nula en contraposición con las demás cerámicas, haciéndola muy higiénica y fácilmente reusable.
- La alta durabilidad y resistencia la hacen ideal para aplicaciones que requieren gran demanda de resistencia mecánica.
- No solo soporta altas temperaturas, sino que al usarse en vajillas conserva el calor de los alimentos contenidos en ellas.
- Un dato curioso es que en China una de las cualidades que ayudaban a distinguir a la porcelana de sus imitadores era su resonancia. Esta, al ser golpeada, produce un sonido muy parecido al que haría un metal.
Cocción de la porcelana
Aunque con estos elementos la composición de la porcelana estará completa, el secreto para elaborarla no termina aún. El método de cocción es parte fundamental del proceso. Suele cocerse a una temperatura cercana a 1800°C y en dos fases. La fase de obtención, a 1800°C, da como resultado un material duro y rugoso. En la segunda, el vidriado, a 1450°C, se obtiene el acabado brillante característico.
Usos de la porcelana
Los usos de la porcelana son varios. Gracias a su resistencia química es usada para hacer instrumentos y recipientes de uso científico. Su buen aislamiento eléctrico la posiciona en productos electrónicos tan comunes como los condensadores. Puede resistir hasta 1100°C lo que justifica su presencia en componentes de uso industrial.
Pero lo mejor de todo es su aspecto delicado, brillo e impermeabilidad, que la hacen útil para objetos de uso culinario. Nos referimos a vajillas de todo tipo, pero también a jarrones y lámparas.
Tipos de porcelana
Existen 4 principales tipos de porcelana. Su composición es el factor distintivo que las clasifica.
Porcelana dura
La porcelana dura corresponde a la fabricada con la receta tradicional de caolín, feldespato y sílice. La porcelana china original también pertenece a este género. Es de alta dureza y resistencia, resonante y suave al tacto. Las vajillas de porcelana son su producto más conocido, aunque tiene un sin fin de aplicaciones.
Porcelana blanda
La porcelana blanda se elabora sin caolín. Se le denomina blanda porque el acero puede rayar su superficie y se quiebra ante cambios de temperatura bruscos. Los usos de la porcelana blanda están más orientados a la elaboración de esculturas u objetos decorativos.
En la antigüedad, cuando no se conocía como hacer porcelana verdadera (o dura) esta era la única opción en Europa. Tenían la opción de hacer este tipo de elaboración o traer piezas ya hechas desde China.
Porcelana de ceniza de hueso
La porcelana de ceniza de hueso o Bone China contiene ceniza de huesos de animal además de los tres ingredientes. La concentración suele ser de al menos de un 30% de polvo de hueso, que incrementa la cohesión de las sustancias. Posee una gran blancura y transparencia, además de mayor dureza y resistencia a los golpes, en comparación con las demás porcelanas, por lo que es altamente cotizada. También, se le conoció en el pasado como porcelana inglesa.
Porcelana francesa
La porcelana francesa fue desarrollada para imitar a la porcelana dura. Se elabora con frita y tiene un color amarillento como de marfil. Se le conoce como un tipo de pasta blanda.
Aunque estos son de los estilos más conocidos, no significa que sean los únicos. En el siglo XVIII, la evolución de las técnicas de elaboración de pasta dura fomentó la diversidad de recetas.
La Porcelana fría, ¡sin horneado!
Se llama porcelana fría porque no requiere horno para el acabado de sus obras. Es una masa de fácil moldeado que se seca al aire libre. Suele ser popular para confeccionar objetos decorativos para fiestas de cumpleaños, recuerdos o cualquier otra cosa.
Sus dos ingredientes más importantes son la cola vinílica y la fécula de maíz. Los demás varían con la receta, como el ácido cítrico, el aceite de bebé o la vaselina. Existen dos procesos de elaboración de la masa, uno involucra cocción a fuego lento de los componentes en una sartén. El otro solo mezcla los ingredientes hasta obtener la consistencia deseada y luego para finalizar pasa la masa al frigorífico.
Después de obtener la consistencia deseada hay que decidir cómo se añadirá el color a la figura. Se puede pintar después de formar la obra o también añadir pigmentos que dan color a la masa. La masa coloreada con este último método guarda semejanza con la plastilina. Tras darle color solo queda moldearla y se procederá a secar y endurecer a temperatura ambiente.
Los restos no utilizados pueden guardarse cubriéndolos en aceite y en una película plástica, depositándolos en recipientes cerrados herméticamente. Si no se siguen estos pasos, la masa restante se endurecerá irremediablemente como si fuera una de las figuras moldeadas.
Aunque es de las favoritas para manualidades por su accesibilidad y bajo costo, no puede competir con la porcelana convencional. Carece de la versatilidad, la dureza y la resistencia característica de la misma. Eso no evita que sea una excelente opción para crear objetos decorativos.
La porcelana es una pieza de arte que hizo historia en todo el mundo. Cambió la manera en que usábamos los materiales para hacer alfarería, resultando en objetos más prácticos y duraderos.
